¿Qué es?

La Serotonina es una monoamina neurotransmisora sintetizada en el Sistema Nervioso Central (cerebro y médula espinal) y en el tracto gastrointestinal. La serotonina también se encuentra en varias setas y plantas, incluyendo frutas y verduras.

La serotonina como neurotransmisor representa un papel importante en la inhibición de estados de ánomo como el enfado, la agresividad, la  temperatura corporal, estados de humor, el sueño, la naúsea, la sexualidad y el apetito.

Estas inhibiciones están relacionadas directamente con los síntomas de la depresión.

En concreto, la mayoría de antidepresivos se ocupan de modificar los niveles de serotonina en el individuo.

Además de esto, la serotonina es también un mediador periférico de la señaldado que sus principales almacenes se encuentras en las plaquetas de la sangre.

Anatomía y ubicación

Las neuronas de los núcleos del rafé son la fuente principal de liberación de serotonina en el cerebro. Los núcleos del rafé son conjuntos de neuronas distribuidas a lo largo del tronco encefálico.

Así, la activación de este sistema serotoninérgico tiene efectos en varias áreas del cerebro, lo que explica los efectos terapéuticos derivados de su regulación.

En cuanto a su inhibición son varios los agentes que pueden bloquear su recaptación incluyendo el MDMA o éxtasis, anfetamina, cocaína, dextrometorfano (un antitusivo), y los antidepresivos tricíclicos, además de los propios Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina.

Efectos derivados de la regulación de la serotonina

Como en el caso de otros neurotransmisores, los efectos de la serotonina en el carácter, el humor y el estado mental humanos, y su papel en la conciencia, son muy difíciles de determinar.

Sin embargo hay pruebas de su influencia en el comortamiento humano y su interacción con otros neurotransmisores.

Concretamente las áreas funcionales que mayor influencia ejerce la serotonina son la regulación del apetito mediante la saciedad, equilibrar el deseo sexual, control de latemperatura corporal, de la actividad motora y de las funciones perceptivas y cognitivas.

La serotonina interviene así mismo sobre otros conocidos neurotransmisores como son la dopamina y la noradrenalina, que están relacionados con la angustia, la ansiedad, el miedo, la agresividad, así como con los problemas derivados de trastornos alimenticios.

La serotonina también es necesaria para elaborar la melatonina (inductor del sueño), una proteína que es fabricada en el cerebro en la glándula pineal, y es la encargada de la regulación del sueño.

La serotonina aumenta al atardecer ya que a partir de esta sustancia se sintetiza la melatonina en la glándula pineal precisamente por la noche.

La melatonina disminuye al amanecer, que es cuando se inhibe su sintesis, aumentando así la síntesis de serotonina (que ya no es transformada a melatonina).

Otra función importante de este neurotransmisor, es la de actuar como reloj interno de nuestro cuerpo.

El relog interno es lo que a su vez determina nuestros ciclos de sueño y vigilia. El reloj interno también es el encargado de coordinar otras funciones biológicas como son regular la temperatura corporal y el cortisol (hormona del estrés).

La correcta coordinación de estos cuatro elementos hace que podamos dormir profundamente y despertar descansados. Los hombres producen hasta un 50% más de serotonina que las mujeres, por lo tanto, estas son más sensibles a los cambios en los niveles de serotonina.

Finalmente se considera demostrado que la serotonina tiene una función importante en la densidad y arquitectura ósea. Las personas que toman antidepresivos del tipo inhibidores de la recaptación de la serotonina pueden generar osteoporosis (redución de la mas y densidad de los huesos).