El método láser es una alternativa viable para adelgazar. Este método persigue controlar la ansiedad, regular el apetito y evitar comer compulsivamente.

UNA DIETA EQUILIBRADA

Otra de las partes importantes que nos dan certeza de un éxito asegurado con nuestro protocolo de adelgazamiento, es en principio el contar con la Licenciada en Biología y Bioquimica, Rosa María Álvarez, que desde los conocimientos atesorados así como una dilatada experiencia en consulta, te elaborará un menú sano y equilibrado tanto a tus necesidades alimentarias, como a tus particulares apetencias y gustos. Entre los dos consensuareis un plan de nutrición cabal que no sea, una más de las dietas yo-yo, que hayas podido haber realizado antes, sino una apuesta eficaz y duradera.

MÉTODO LÁSER PARA ADELGAZAR

El método láser se aplicará mediante ocho sesiones de láserpuntura, tres en días consecutivos la primera semana, dos en días alternos en la segunda semana, en la tercera semana lo mismo que en la segunda y por fin una más de refuerzo en la semana cuarta. Con este bagage de aplicaciones Laserpunturales estás preparado para eliminar la ansiedad, que es lo que sustenta la comida en exceso, así como una activación del metabolismo.

Al cabo de veintiun días tu organismo habrá grabado celularmente, tu nuevo comportamiento y actitud hacia la comida, habiendo provocado una consolidación de lo aprendido para esta nueva etapa.

Al inicio del tratamiento y si es posible en la primera sesión de Laser, se te practicará una valoración nutricional por parte del Dietista-Nutricionista Fernando Rojo, que dará como resultado una Dieta personalizada , ajustada y realista.

También se convendrá un periodo de ejercicio durante el día, siempre desde un punto de vista objetivo y adaptado a las apentencia y aptitudes particulares de cada uno. Lo importante es que sea sostenible en el tiempo y para ello ha de ser realista.

Y por último se te darán una serie de herramientas enfocadas en las terapias naturales, que te puedan ayudar en algún momento de debilidad, a no sucumbir y tirar la toalla, por el tedio.